“Perspectivas económicas para el norte de Gales y las regiones vecinas”

25 de enero de 2022

Con ASKAR SHEIBANI

CEO, Comtek Network Systems y presidente, DBF

Las perspectivas económicas para el norte de Gales y el área de Mersey Dee parecían relativamente positivas hasta noviembre de 2021.

La llegada de la nueva variante del virus Covid-19, Omicron, trastocó rápidamente todas las previsiones económicas.

El mercado es extremadamente volátil y está sujeto a cambios rápidos. China es el mayor proveedor mundial de componentes y bienes y ha adoptado las reglas más estrictas de Covid.

La política de cero covid de China se ha convertido en una carga grave dentro de las cadenas de suministro según el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Aunque la demanda de productos manufacturados es bastante saludable, desafortunadamente, el cuello de botella de la cadena de suministro está obstaculizando la producción. Por ejemplo, si desea comprar un automóvil nuevo, debe esperar hasta nueve meses para que se lo entreguen.

También nos enfrentamos a una gran escasez de mano de obra calificada dentro de nuestra región. Durante mucho tiempo, el Reino Unido dependió de los trabajadores europeos para cerrar la brecha de escasez de mano de obra, pero muchos ahora han desaparecido debido al Brexit.

Se prevé que los costos de la energía aumenten aproximadamente un 50 % en abril, lo que creará una crisis económica y social significativa entre los más pobres de la sociedad y también para las pequeñas empresas.

La perspectiva de una guerra entre Rusia y Ucrania podría bloquear fácilmente la cadena de suministro de gas de Rusia a Europa, lo que provocaría un aumento aún mayor de los precios de la energía.

Todo lo anterior ha incrementado drásticamente la inflación que se espera alcance el 7% en abril. La perspectiva de una mayor inflación ha persuadido al Banco de Inglaterra a decidir aumentar la tasa de interés, aumentando así las hipotecas de los propietarios de viviendas y poniendo a las pequeñas empresas bajo más presión.

La inflación, especialmente en necesidades como alimentos y energía, ya está teniendo un impacto devastador en los más pobres de nuestras comunidades.

La relación del Reino Unido con su mayor mercado vecino, la Unión Europea, es, en el mejor de los casos, muy fría. La fuerte relación del Reino Unido con China ha empeorado progresivamente en los últimos años. El gobierno está luchando por llegar a acuerdos de libre comercio con el resto del mundo, en particular con su aliado más cercano, Estados Unidos.

Algunas de estas desafortunadas condiciones económicas son globales y están fuera del control del gobierno del Reino Unido. Algunos, sin embargo, son el resultado directo de las malas políticas del gobierno del Reino Unido.

Nos enfrentamos a un panorama económico incierto y tanto el gobierno del Reino Unido como el de Gales deben actuar con urgencia para mitigar las presiones financieras que enfrentan las pequeñas empresas y los más pobres de nuestra sociedad.

No hay justificaciones para que el gobierno del Reino Unido aumente las contribuciones al Seguro Nacional en este momento. No hay justificación para ningún aumento de impuestos mientras el mundo atraviesa condiciones económicas inciertas.

El Banco de Inglaterra debe contener todas sus previsiones de subidas de tipos de interés. La alta inflación actual es un fenómeno global que el Banco de Inglaterra tendrá muy poca influencia para revertir. También debe continuar con una flexibilización cuantitativa adicional para que los préstamos bancarios a las pequeñas empresas sean accesibles y estén libres de barreras inaceptables importantes.

Los gobiernos del Reino Unido y Gales deben eliminar todas las barreras burocráticas innecesarias y acelerar la mejora planificada de las infraestructuras en crisis de las regiones del norte de Gales y Mersey Dee, como el ferrocarril y la tecnología digital, lo que estimulará el crecimiento económico regional.

El norte de Gales tiene una oportunidad fantástica de ser un líder mundial en producción y tecnología de energías renovables. Los gobiernos del Reino Unido y Gales deben aprovechar esta oportunidad única y acelerar el proceso de inversión planificada antes de que sea demasiado tarde.

El norte de Gales tiene las condiciones adecuadas para desarrollar infraestructura de energía mareomotriz y tecnología de producción de hidrógeno.

Desafortunadamente, el gobierno del Reino Unido está envuelto en luchas internas y desunión, lo que es una gran preocupación para las empresas.

Con suerte, todas estas crisis internas gubernamentales inútiles pronto terminarán y prevalecerán el sentido común y la madurez.

Estamos atravesando un período económico volátil y en este momento se necesita desesperadamente un gobierno unificado totalmente enfocado, que trabaje junto con el gobierno de Gales como socio, para mitigar cualquier posible desafío económico.